jueves, 6 de abril de 2017

El Faro, acueducto comunitario para el cuidado de la vida





¡TODOS POR EL AGUA! Acción de recolección de fondos acueducto comunitario Barrio el Faro

El domingo 2 de abril en el borde de la ladera centrooriental donde termina la Medellin urbana, asfixiante y competitiva, los habitantes del Faro continuaron su caminar colectivo para resistirse a desaparecer, demostrándole a las administraciones que la han invisibilizado que la resistencia comunitaria sigue en pie.
Esta acción comunitaria se realizo con el fin de recoger fondos para la construcción del acueducto comunitario, en ella tuvo lugar un recorrido a la bocatoma en la Quebrada la Castro, un sancocho comunitario y actividades culturales con circo clown, malabar, musica de cuerdas (como guitarra), entre otras actividades.

miércoles, 5 de abril de 2017

Desalojo en la Iguaná (1)

El martes 28 de marzo fueron desalojadas por el Esmad 24 familias en el sector Los Ranchitos, del barrio La Iguaná, en Medellín, por habitar en zonas de alto riesgo. Las mismas, contaron con la ayuda y el apoyo de los estudiantes de la Universidad Nacional que las albergaron en el coliseo de la ciudadela universitaria, cercano a la zona del desalojo.

Las 24 familias son víctimas del conflicto armado, la mitad de ellas tienen Registro Único de Víctimas y la otra mitad tienen este documento en trámite. Tras negarse a salir de sus hogares, fueron sacadas a la fuerza por el Esmad al tiempo que los demás habitantes del barrio exigían el respeto por la vida, una vivienda digna y soluciones concretas por parte de la Alcaldía de Medellín.

COMUNIDADES AFECTADAS POR LÍNEAS DE TRANSMISIÓN DE HIDROITUANGO EXIGIMOS SE NIEGUE LICENCIAMIENTO AMBIENTAL


#NomasLineasdeTransmision
Marzo 31 de 2017
La NO participación de las comunidades afectadas por Hidroituango en el proceso de licenciamiento ambiental ha sido una de las grandes dificultades que ha generado conflictos con la comunidad afectada en el Cañón del río Cauca, maxime cuando esta zona ha sido agobiada por el conflicto armado por más de cuatro décadas; es decir, en términos de garantías de no repetición el Estado Colombiano por medio del gobierno central y sus instituciones debe abstenerse de cualquier acción que limite los derechos de las víctimas o genere situaciones que deriven en la repetición de hechos victimizantes, como por ejemplo el desplazamiento forzado.