En Moravia y Puerto Nuevo sigue la necesidad de articularse ante el Medellín imparable e innovador

Decenas de vallas publicitarias intentan atraer las miradas con su lema empresarial de Medellín imparable y ahora innovador, ya que hay feria permanente de los terrenos más aptos para desarrollo vial, inmobiliario y empresarial ¿Cuál es uno de los más apetecidos? la llanura al lado del río, donde hace 5 décadas varias comunidades levantaron asentamientos y barrios entre ellos Moravia y el sector Puerto Nuevo -entre los barrios San Isidro y Palermo-.

Allí muchos hogares han sentido un Medellín imparable e innovador en demolición de ranchos y tejidos sociales, por eso en diversos comités y mesas de trabajo están alertas ante la adquisición de terrenos para las obras Conexión occidente-oriente (Castilla-Aranjuez) puente calle 93-94 hoy llamado Puente Madre Laura, afectando mil familias.

Según una preocupada Madre cabeza de hogar, en situación de desplazamiento e inquilina durante una asamblea comunitaria en Puerto Nuevo “Nuestros derechos no son mendigables, ni negociables….no estamos pidiendo un favor ¿Cuál favor? Cuando ustedes hicieron su casa no vino EDU, obras públicas o entidades municipales a decir ¿le faltan ladrillos? Tampoco pedimos carro y beca si no algo justo. Todos necesitamos casa digna, un futuro para nuestros hijos….Si en otras partes han podido y los ha parado hasta que reconozcan derechos, acá también”.

Los avalúos comerciales de los predios los hace Avalúos y Tasaciones de Colombia Valorar S.A -de la Lonja Raíz-, pero solo le toman foto a lo que conviene, lo más feo, lo despintado, donde falta una teja, si hay 2 baños le toman a uno, en algunos casos no le toman al balcón ni al garaje, ni a instalaciones de servicios públicos. Al respecto un joven se acercó a una de las asambleas con “una experiencia maluca, porque van a ponerle precio a tu casa y a tu negocio” y “no sabés si vas a poder montarlo y si te va ir bien en otro lado, sabiendo que es el sustento”, eso “me parece un atropello”.

Se espera un plan de contingencia social exigidos por los organismos de DDHH a una obra de tal envergadura, benefactora de la ciudad, pero que afecta a esta comunidad. 

La división de la malla social: el máximo atropello                                               

Intencionalmente los funcionarios han difundido rumores para dividir a la población, por lo que otro de los afectados enfatiza en las reuniones cuando la obra no había encerrado en hojas zinc la cancha, “debemos tener buena relación con los inquilinos, la idea es que estemos unidos en armonía para que cordialmente podamos sacar algo. Si empezamos peleas entre nosotros, las entidades van a aprovechar y abusar más”.

La Mesa de Vivienda y Hábitat de Moravia también aporta conocimientos al arrendatario, “cuando lo intervienen con obra, tienen que darle atención preferencial -prelación-”, mas allí que la mayoría tras ser desplazadas por la violencia serian de nuevo desplazadas sociales por “orden del alcalde”. Muchas personas alegan amplitud tranquilidad y esfuerzo en su vivienda como para recibir solo 43 millones que entregan de subsidio en muchos casos.

Allí “en ningún momento estamos aburridos” donde “podemos ir al centro y volver a pie” y hay “posibilidad de sobrevivir” ya que “la mayoría dependemos del mínimo o menos”. Los arrendatarios manifiestan que deben tener voz en la concertación, aunque ¿concertar la destrucción de barrios y mallas sociales?

Hace varios años, atendiendo al Principio de Favorabilidad, allí instaban a la alcaldía informar el tratamiento a las familias sacadas con expropiación administrativa por la vía regional norte y “alto riesgo”, siendo inducidas algunas en proyectos de vivienda de interés prioritario o social que no corresponden a sus expectativas y necesidades, tan lejos como en los apartamentos del Limonar desde los 90s donde algunos se han acomodado, o actualmente en Ciudadela Nuevo Occidente dándose así una serie de desplazamientos intraurbanos ya que muchos se vuelven por la violencia o el alto costo de vida. 

De la experiencia se aprende.

En diciembre se cumplieron 3 años de la muerte de la niña Gloria Katherine que jugaba en el barranco del lado de los apartamentos La Herradura, donde reubicaron 180 familias de Moravia, a 60 mts del río, cerca de puerto nuevo y exacto donde fue destruido el barrio La Herradura supuestamente “en alto riesgo” por lo que dentro del plan parcial de Moravia desde 2004 se planeó el “Parque Lineal La Herradura”.

Muchas personas recuerdan que donde cayó la niña “no estaba terminado ni con lona verde encerrada para que la gente no pasara”, ¿Por qué traen la persona sin terminar la obra? es la pregunta de Fredy quien con otros/as habitantes recolectaron, soldaron y pintaron los pasamanos de escalas, balcones y corredores que se han deteriorado en menos de 2 años, a lo cual se agregan los desagües malos, las losas de concreto del suelo y andenes que ceden, todo porque “si este piso necesita 15 bultos de cemento, echan 10” y así funcionan muchos de estos recursos según se han enterado estas familias a quienes en los planos les pintaron pajaritos, mas hoy conviven con minúsculos gusanos que salen por entre los muros de estas “bóvedas” llamadas apartamentos llenos de humedad.

Respecto a los proyectos de sostenibilidad económica que tenían en sus lugares de origen, la reparación debe incluir el tiempo que dejaron de recibir ingresos, pero no les entregan los locales oportuna y efectivamente, incluso les tocaría pagar por ellos.

Por su parte, también se ha quedado en veremos el Plan de Abandono de la Asfaltadora Colombia -estipulado en el Plan Parcial- cuyo propietario CAMACOL de gran poder económico y en las políticas municipales sigue ahí en las mañanas desprendiendo un humero negro, gran cantidad de químicos, por lio cual la mayoría de quienes hace por ahí 4 años sufren asfixia, tienen el argumento -apoyado por médicos que les atienden- de haberla cogido tras ser reubicadas al lado de las chimeneas, montañas de cemento, triturado y demás material a cielo abierto que influyen en la extensión también de otras enfermedades respiratorias alrededor.

A quienes si reubicaron en Pajarito o el conjunto de urbanizaciones Ciudadela Nuevo Occidente, también se les incrementa la insatisfacción. Por eso muchos de quienes con apreciable esfuerzo levantaron sus propias condiciones untadas de barro, hoy ni se atienen a programas de arriendo temporal ¿acaso la hecha de sus casas no ha sido permanente y sin ayuda de ninguna institución? Más bien se han generado comités con la intención de articular comunidades afectadas como la de Puerto Nuevo y Moravia, reclamar vivienda usada, reasentamiento digno y no como la administración mande, ni en urbanizaciones verticales para priorizar el gasto en cemento a beneficio de interventoras y constructoras “viendo que esos proyectos salen de bolsillo de todos, de impuestos, de lo que comemos” y hay “mucho terreno donde se pueden hacer barrios y no solo edificios”.

Vemos pues una “Medellín innovadora”, nada compatible con “un hogar para la vida”.

mural realizado con el Colectivo La Colmena en el sector Puerto Nuevo